Pueblos Unidos cayó como local 2 a 1 ante Antártida de San Francisco, Molina y Boca de penal marcaron para la visita, mientras que Sachetto había puesto el empate transitorio también con disparo desde el punto penal. Los dirigidos por Cirio Sánchez afrontaron todo el segundo tiempo con un jugador menos por la expulsión de Gonella a los 40 del primer tiempo.
La primera mitad fue de tramite parejo, la visita con un juego mas elaborado y el local mas frontal, pero escasearon las situaciones de gol. Recién a los 35, Molina que había ingresado por Benítez, encaro desde la derecha en diagonal y definió cruzado ante la salida de Bustos. A los 40 el C.A.P.U. otra vez sufrió una expulsión, la de Gonella. A los 44 Olivera ganó en velocidad y al ingresar al área fue derribado con una clara falta, Sachetto ejecuto el penal y marco el empate con el que se cerraría la primera etapa.
El complemento no cambio mucho, tuvo mucho vértigo y lucha pero poca claridad. A los 24 minutos el lateral Ramírez paso al ataque y fue derribado por Smit en el limite del área, por lo que el arbitro Luis Defel sanciono penal y el goleador Boca señalo el 2 a 1. Sánchez armo una línea de tres en el fondo y mando a la cancha a Rolando y Navarro para tratar de torcer la historia. Rolando de cabeza y Olivera en tiempo de descuento tuvieron la oportunidad de empatar, pero la falta de puntería de Pueblos Unidos ya es preocupante y lo dejo con las manos vacías.
Analizar el andar irregular del C.A.P.U. en esta parte del torneo, es detenerse en un par de puntos que al parecer no terminan de resolverse.
1- Es muy difícil afrontar la mayor parte de los partidos con inferioridad numérica producto de las expulsiones. Esto influye en el movimiento colectivo del equipo y obliga a un esfuerzo físico del resto que muchas veces lleva a la impotencia.
2- El C.A.P.U. no tiene gol en sus delanteros, pero tampoco parece tener otras vías para llegar a el; no tiene remate de media distancia y no crea superioridad numérica cuando ataca.
3- Olivera-dependencia, » El Trompi » es la única carta ofensiva capaz de generar peligro al adversario. El delantero deja la vida en cada corrida ya sea en ataque o bien dando una mano para recuperar el balón, su compromiso para con el equipo es admirable.
Ya pasaron cinco fechas del clausura y no hay margen para el error, no se deberán escapar puntos de local y tratar de rescatar algo de visitante.