26/08/2013 | 16:28 Pablo Lanusse, que representa a la familia de la víctima, se mostró indignado ante la hipótesis de un perito de la defensa del portero que la joven habría muerto en un «juego sexual consentido».
El abogado Pablo Lanusse, quien representa al padre de Ángeles Rawson, advirtió hoy que no permitirá «más que se le falte el respeto» a la joven, tras las declaraciones de un perito de la defensa del portero Jorge Mangeri en las que sugirió que la chica habría sido víctima de un «juego sexual consentido».
«Tengo bronca, no por ser de abogado de la familia Rawson, sino que los conozco desde hace 40 años. Lo hablo porque estoy recontra caliente. No se puede mancillar la memoria de la víctima», explicó Lanusse en relación a los dichos de Adolfo Méndez, perito de parte del único detenido e imputado en la causa.
Lanusse, en la puerta de los tribunales de la calle Talcahuano, indicó a la prensa que «el informe es concluyente» y calificó como una «bajeza» las declaraciones del perito Adolfo Méndez.
Incluso el ex fiscal indicó que el informe de la Junta Médica que examinó nuevamente el cuerpo de Ángeles, «trajo la luz y la verdad» al caso, al establecer que la joven murió asfixiada por su agresor en el marco de un ataque sexual.
El perito Méndez y el abogado de Mangeri, Miguel Ángel Pierri, lanzaron hoy a través de la prensa una nueva y llamativa hipótesis sobre la muerte de Ángeles, al arriesgar que pudo haber sido víctima de un «juego sexual consentido».
A raíz de esos dichos, el abogado Lanusse le solicitó al juez Javier Ríos que requiera la entrevista que Méndez concedió a la señal C5N para acceder íntegramente a sus declaraciones y tomar las medidas que crea necesarias, ya que, además, al adelantar detalles de la autopsia el perito del abogado Pierri habría violado expresas normales legales al respecto.
«No voy a permitir que sigan embarrando la cancha», advirtió Lanusse, quien resaltó que solo Méndez no estuvo de acuerdo con las conclusiones de la autopsia -que incriminan seriamente a Mangeri- y hasta contradijo sus propias conclusiones de la primera autopsia.