Ante la postergación de las paritarias nacionales, que estaba convocada para esta semana, los sindicatos pertenecientes a la CGT de Caló se encuentran «en estado de alerta». Amenazan con afectar el inicio de las clases y exigen un mínimo de $5.500
Luego del reto de la presidente Cristina Kirchner a los gremios por pedir aumentos salariales y al líder de la CGT oficialista, Antonio Caló, por haber afirmado que a la gente no le alcanza para comer, los cuatro sindicatos docentes nacionales agrupados en esa central obrera salieron rápidamente a responder el mensaje presidencial con el reclamo de un fuerte incremento del haber básico.
En el escrito, resaltaron su «honda preocupación ante la ausencia de una convocatoria por parte del Ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, para la reapertura de la Paritaria Federal Docente» e insistieron en que «defendemos este ámbito democrático y creado por Ley para la discusión de las condiciones de trabajo, entre ellas el salario de los docentes argentinos».
De todas formas, los gremios señalaron que serán «prudentes pero inflexibles a la hora de defender el salario del trabajador de la educación» y opinaron que «es necesaria una convocatoria urgente para atender nuestro reclamo. De lo contrario, las organizaciones docentes convocaremos a nuestros cuerpos orgánicos para la disposición de un Plan de Lucha que afecte sensiblemente el inicio de clases».